jueves, 16 de noviembre de 2023

no lo sé

habré pasado por aquí más de cien veces y pocas veces me he parado un rato a disfrutarlo. y no hablo de un sitio sino de un pensamiento. vamos tan rápido por el borde el abismo que solo nos preocupamos de no caernos en él. no quitamos la vista del precipicio que amenaza engullirnos al menor error y gastamos todo el esfuerzo en no equivocarnos por las consecuencias que tendría hacerlo. muchas veces incluso sacamos pecho para explicarlo como una gran proeza, como un gran viaje a la luna cuando ni siquiera hemos despegado los pies del suelo. luego, cuando frenas y te giras, ¿no se os encoje el corazón viendo por donde has pasado?¿no os parece malgastado ese viaje?

un día. y otro día. esquivando el vacío para llegar al final...vacío? como mucho medio lleno.

el camino no nos lo va a cambiar nadie. porque es el que es y no siempre sabemos cual es. yo, al menos, el mío no lo tengo claro. pero a como lo recorremos si podemos meterle mano. pienso yo que podemos ir más tranquilos y mirar al lado contrario del peligro que nos acecha. porque desde la desaceleración estoy convencido que la amenaza es menor y da tiempo a valorar otras opciones. creo que a veces incluso podríamos parar y sentarnos con los pies colgando de ese abismo amenazador. de temerlo a gozarlo. abrir una(s) cerveza(s) y esperar. que salga la luna. o que salga el sol. que se vaya la luna. o que se vaya el sol. y retomar el camino desde la agustera que nos habrá quedado. si lo hacemos así, estoy convencido que al llegar al final no habrá la necesidad de girarse porque ya lo habrás visto todo. y si además lo hacemos acompañados de vez en cuando, mucho mejor.

el método no asegura la plenitud final. ni siquiera os puedo prometer que no haya tropiezos (porque hasta yendo despacio existe el riesgo) con caída y golpe. pero nos permite elegir el mejor sitio donde parar. donde sentarnos. y en lo que estoy dispuesto a apostar con vosotr@s es que el poso dejado es el de satisfacción de hacer bien las cosas. no tengáis duda que la sonrisa plena que decorará vuestra cara no se borrará a la primera de cambio.

¿y por qué, sabiendo esto, sigo pasando rápido y vigilando un borde que ocupa todos mis sentidos para llegar...para llegar...para llegar hasta donde se me acaben las fuerzas, no hasta donde yo quiero ir?

no lo sé.




jueves, 27 de julio de 2023

PTcientoveinte

el castillo de belmonte engullía poco a poco a todos los aventureros que iban llegando. los tragaba solos o en pequeños grupos, acompañados de familiares o con equipos de apoyo. incluso algún turista despistado contribuía a llenar la barriga de piedra del monumento. casi treinta minutos antes de volver a vomitarlos todos de golpe se oía ya desde fuera la megafonía con ese soniquete agradable que tiene el portugués. me recordaba esos conciertos para los que no tenías pase e ibas a escucharlos desde fuera con unas litronas.

pero para este sarao si tenía entrada. una plaza adquirida casi tres años antes que, por mucho tiempo que haya pasado, no me daba derecho a nada e incluso había relajado un poco los deberes que incluía. compartiendo nervios con mi hermano creo que fuimos parte del postre del edificio histórico donde nos agruparon para unos últimos consejos: mucho calor de día y algo de frio de noche. prohibido el apoyo entre bases de vida bajo la amenaza de la conciencia de cada uno para el resto de sus días. track, track y track. y poco más.

salir cuesta abajo nunca me ha gustado pero con un trote distraído y de charleta no es tan mala opción. dejamos pronto el pueblo y sus sombras atrás para meternos en los primeros kilómetros de solana. mezclando pista y asfalto, lo que se convertirá en la tónica del recorrido, avanzamos en un grupo de unos veinte coloridos personajes. con la elasticidad propia de todos los inicios el grupo se estira y las conversaciones se van apagando. de pelotón pasamos a hilera y de hilera a collar de cuentas multiforma. mientras avanzan los kilómetros se empieza a ver también el que es más andarín y el que es más trotón. y entreponiendo cierta distancia ya, nos vamos ubicando en nuestro ritmo cada uno.

con los últimos repechos que llevan a sabugal se comienza a ocultar el sol y hago cuentas para ver si puedo llegar a la base de vida sin parar a sacar el frontal. creo que me irá justo...pero creo mal y he de parar antes. la hora de menos y la situación más al oeste que hay en portugal frente a barcelona también entretiene pensamientos y provoca cuentas de horas por delante con luz artificial. y con menos calor. 

comer un plato de pasta y rellenar bidones. un poco de puesta al día con raul y salgo mejor que lo que he llegado (estaría bueno que no fuera así) camino de los siguientes oscuros cuarentayocho kilómetros hasta penamacor. sigo de cerca a un grupo de tres portugueses parlanchines que parece que vuelven de fiesta por lo animados que van. poco a poco baja la temperatura mientras trotamos junto a un embalse al que damos tooooda la vuelta. la proximidad del agua y alguna ráfaga de aire hacen correr algún escalofrío por la espalda sudada en aquellos tramos más pegados al borde. he pasado al grupo de fiesteros y en la más completa oscuridad encuentro el coche parado de mi hermano con él medio dormido dentro. me entretengo medio minuto y me rearma las ganas con dos palabras. no me lo esperaba ahí y el revulsivo ha funcionado...tanto que salgo disparado por donde no es y me equivoco de pista regalando unos quinientos metros. corremos ahora junto a una acequia y de nuevo oigo en la lejanía, pero por delante, a los parlanchines. inmediatamente localizo no muy lejos la luz de sus frontales. no hay mucha vegetación pero es una zona revirada donde hay bastante eco. me deben haber pasado en mi despiste pero me va bien porque llego con ellos a un pueblo donde me llevan directos a la fuente. en otros sitios la he tenido que buscar yo al no conocer los rincones. y me vuelvo a ir en la última parte.

en penamacor hay que subir hasta lo más alto del pueblo y puedo apagar el frontal con las farolas de las calles. de hecho ya entre dos luces bajo por el otro lado y no necesito volverlo a encender pues tenemos un ratito de parada en la segunda base de vida que nos acerca a las noventa kilómetros y a un nuevo día que viene calentito.

un tercer tramo tras beber caldo y comer salado que viene cargadito de arcén y va haciendo mella. con la línea blanca continua algo en la cabeza empieza a despistar la concentración. un tramo de pista con mucha arena suelta me deja a pleno sol buscando en el horizonte algo de subida. me faltan cuatrocientos positivos por estas alturas y pero lo que veo de subida esta muy cerca y no debe ser. o si. siempre que demos una vueltecita antes de encararlo :-)

creo que esta fue la chispa que prendió el fuego del dejarlo. creo que un tramo de asfalto largo y recto con la subida a monsanto constantemente a mi izquerda fue la gasolina que aceleró la combustión de las ganas de seguir. o puede ser que tras un último repecho a la sombra pero con calor, un pilón con agua fresca donde meter los pies fuera  el punto de no retorno a la carrera. dejarlo tras una subida. parar cuando venía bajada. no ser capaz de darle la vuelta a un aburrimiento que nunca me debió vencer...


kilómetro cientoveinte aproximadamente y mi pt estaba finiquitada con otro "apellido". con el poso de que algo ha quedado incompleto en mi. el aprendizaje de esta carrera no lo puedo tener en pirineos, en gredos o en los alpes. y me lo he llevado. pero en el puzzle del corredor que soy hay un hueco donde ahora mismo falta una pieza para que un día este completo. si el hueco se rellena o no es pronto para saberlo. se que yo tengo trabajo que hacer para volver como a mi me gustaría. y no quiero hacerlo solo...



lunes, 3 de octubre de 2022

lo que hacemos

no siempre lo que hacemos ha de tener un porque. muchas veces hacemos cosas con un por quién o un para quién. y desde ahí quizás, solo quizás, se puede entender todo un poco mejor...

... gasté todos los nervios que entraban en la mochila entre las 3:56 que casi-sonó el despertador y las 4:58 en que "mi" equipo me soltó en la rotonda del polideportivo de Bagá. tras la ronda de abrazos largos y verlos salir para coll de pal conecté con lo que tenía por delante y caminé hacia la salida con la tranquilidad del trabajo hecho y el para quien de ultrapirineu muy claro. 
no soy ningún novato pero cada carrera la afronto como si fuera la primera. y así crezco. en los ultras de montaña, el aprendizaje es más puro cuando los problemas no se presuponen pero los gestionas ágilmente en el momento que llegan. porque la búsqueda mental de momentos parecidos y soluciones similares me hace sentir más vivo que replicar patrones aprendidos. matices que te decantan hacia el éxito o el fracaso. y si en meta no has aprendido nada, el esfuerzo no ha merecido la pena. lo que sabes solo tiene valor cuando sirve (a ti o a otrxs) y te hace crecer.


mucha gente y algunos amigos en la salida y carrera de luces por las calles del pueblo, la pista de inicio y los primeros senderos que suben hasta comafloriu pasando por el refugio de rebost. la noche no se hace oscura y se convierte en cómplice de primeros toques de "a ver como estoy". la oscuridad se desvanece empujada por las primeras luces del horizonte y...por los gritos de mi gente! y la onda sonora cruza el frescor del amanecer y, al pasar junto a ellos, siento un bonus extra de energía que me lleva hacia el niu de l'aliga en volandas. hacía frio pero yo sentía que la nieve fundía a mi paso...
el final de la subida, el punto más alto, te lanza hacia una bajada mentirosa llena de trampas en forma de piedras y raíces. algún buen repecho y un par de destrepes. con cuidado. no hay tiempo para pensar porque ahora mismo pensar es perder el foco. y eso, para mi, es caerse. lo dejo para prats de moixerò y el tramo hasta el serrat de las esposes. pienso corto pero mucho, varias veces lo haré a lo largo del día. en pequeñas dosis pero fuerte. uno por uno. y voy asignando kilómetros, dedicando un trote cómodo a la gente por quien hoy quiero correr. se lo merecen y quiero enviar fuerza, mucha fuerza.


vuelvo a conectar con el equipo que me espera en serrat de la esposes pero lo justo porque me echan hacia delante y salgo con los bidones y la boca llena. hacia uno de los tramos que no se me dan bien. es largo, no soy capaz de fraccionarlo mentalmente y tenemos una relación de amor-odio de hace mucho tiempo. amor porque las vistas son espectaculares, sobre todo la zona de tancalaporta con vistas al comabona. y odio porque ves el refugio de prat aguiló a tiro y tienes esa sensación que nunca llegas...pero al final llegas. y comes. y bebes. y sales para pas de gosolans con tiempo de nuevo para pensar. hasta que la respiración se entrecorta y, forzando el paso, picas con los bastones a un ritmo que va a menos según llegas arriba. son zonas donde pruebas la maquinaria. zonas donde no sirve marcar un ritmo fijo porque eso te mata. zonas donde tiras de oficio porque echarle cojones se paga después caro. aunque, desde arriba sea todo bajada hasta gosol. demasiada bajada quizás...
en el polideportivo de gosol entro regular, como bien, bebo rebien y salgo con ganas de verme mejor. cambio de ropa y zapas preparado que ahí se queda. en cuanto a tiempo, mejor que el año pasado pero un poco por encima de la mejor estimación para esta edición. pero el reloj solo es una referencia. para que mi equipo sepa, más o menos, cuando voy a llegar y estén allí. ¡que suerte teneros! las ganas de verme mejor... se quedan en ganas. el calor del tramo que va de gosol a estasen y la bajada después a gresolet me machacan. un gemelo se queja y negociamos un acuerdo. yo aflojo, tú...también. yo no salto, tú no te subes. y funciona. pasar por debajo de dos árboles cruzados en el camino sirven de test para rehacerse. y salgo con dos trozos de manzana del kilómetro ochentayalgo encarando una subida que me encanta, alegre y enchufado.


la subida por la sombra al coll de la bauma para bajar largo a vents del cadí pasa rápido. se que junto al inicio del camino de els empedrats tengo otro bonus extra de energía esperando. lo que pasa allí se queda allí. pero con cinco personas que había esperando sentí que llenaba el camp nou :-) ... 
"toda la gente pregunta y están flipando con tu carrera"
coño, que me pongo a llorar...
"ahora no se puede llorar, vete ya y pelea lo que queda"
y lo siguiente soy yo metido por los tobillos en el torrent de la font del faig una y otra vez. no hay piedras, no hay molestias. solo hay...que acabar. pasar por sant jordi, llenar bidones, comer algo y preparar el frontal por si acaso. trote, trote, trote y coll de escriu. sales del bosque a la luz y te da el sol. y con el frontal puesto. pero ya no se para. solo se baja. hipotecando los cuadriceps mientras te sumerges en un bosque de hayas eterno. o se acaba el bosque o se acaban las patas. dejando algo para la carretera y el tramo final. vuelvo a pensar. me encantaría cerrar los ojos pero caería. me encantaría parar y llamar. escribir mensajes. dejar audios. pero acabar lo antes posible es mejor, pienso. 
...no recuerdo mucho del último tramo, creo que el cuerpo bajó solo mientras el pensamiento le perseguía. ¿nunca habéis tenido esa sensación? ves alguien correr delante y eres tú...
pero recuerdo perfectamente el grito que me sacó de donde estaba en la subida a meta. a una meta luchada donde todo cobra sentido. por quien y para quien. y si no lo entiendes, yo no se explicarlo mejor !



jueves, 7 de abril de 2022

otro 5anto ciel0

dime la verdad.

siempre lo he hecho, me dijo mirándome fijamente justo enfrente.

mientras me acababa de ajustar la mochila frente al espejo del baño de el racó supe que iba a ser un bonito día. por el sitio. por el compañero. por el 5anto ciel0. recogí a jaume que esperaba apurando su café y fuimos para la salida de charleta probando el frontal. todo el mundo hablaba de frío pero los nervios hacían subir la temperatura esperando la salida. y a las 6:00 arrancamos a trotar por las calles de aiguafreda como una gran bola de discoteca bien estirada que dispara haces de luz en todas direcciones. aunque la pista estiró algo el grupo, la entrada en el tallafocs alíneo perfectamente al personal durante los primeros metros de desnivel que nos llevarían hasta el castillo de tagamanent. la noche despejada y fresca permitía ver con esa claridad que viste la noche de una guirnalda de pueblos abajo en el valle. al amanecer siempre hace frío, dijo alguien por la carena d'en bosc. porque siempre lo tiene que decir alguien, y si no... lo digo yo. pero nos quitamos el frontal tras la bajada a vallfornés y no había rastro. fresco si. de nuevo vuelven los calores subiendo al sui. sale el sol que no calienta empujado por un viento que, esta vez si, nos deja fríos. helados. pero no hay humedad. vamos bien tapados y solo el lado de la cara de donde pega el viento se resiente. hasta el samont. alguno desde casa habrá mirado ya el paso por los dos puntos de control que hemos dejado atrás. mientras vamos maridando ratos de conversación y de silencio. son muchas horas juntos. son muchos temas pendientes. son muchos momentos de soledad acompañada.

la bajada hasta el pueblo de montseny pasa rápido y, tras comer algo, animados encaramos la subida al turó del home. un ritmo bueno que podría ser un enemigo dentro de unas horas. ajustamos. y mientras carenamos con cuidado hasta agudes volvemos a sentir el viento frio en la cara. esta vez por la otra mejilla. ninguno de los dos tenemos ganas de la bajada que viene. siempre que venimos a entrenar por aquí la subimos. la subiría 5 veces antes de bajarla una, digo. y se que folguera añadiría 2 o 3 subidas más. con cuidado de no caer y para poder trotar bien la pista a sant marçal pensamos ya en la zona de matagalls. nada más salir del control nos pasa pau que corre la de 53. aprieta y subiendo a coll de pregó se va cómodo tras cruzar algunas palabras. es lo que tiene que ser. hay trozos con hielo tapado con hojarasca y somos prudentes. hasta encarar cómodos y confiados la bajada a viladrau. allí tenemos una referencia de tiempo que nos indica que vamos mucho mejor de lo esperado. pero no vale confiarse. en estas carreras hemos aprendido que todo se gira en una piedra, en una raíz o en un repecho.

vuelvo a pensar en los que estan mirando tiempos de paso en una pantalla y se que empujan. a nosotros "solo" nos queda subir al matagalls y procuramos no retrasar la salida. comer algo, llenar líquidos y...fuera guantes. impensable gesto hace unas horas. el camino serpentea y pega golpes en forma de enraizados repechos. precioso. cuanto más duro más precioso. y es cuando giras volteando sant segimon cuando un tramo bien vertical de lanchas de piedra te pega el viaje. aquí ya se quejan las bielas, se resienten los amortiguadores, se ve bien lejos la cruz del matagalls. a la que nunca llegas porque justo antes giras y bajas a collformic. trotando suave, un dejarse caer que si no controlas te lleva al suelo, sientes que al cruzar la carretera la meta esta bien cerca. es ahora cuando sientes por primera vez que acabar es una opción bien factible. tan factible como trotar por el pla de la calma, pasando control de daños musculares, valorando como será la bajada final que encara 3 repechos express antes de meta. testas cuadriceps, isquios, gemelos. pruebas distintas pisadas. nada esta al 100% pero aquello que más cargado va es lo que hay que proteger en la bajada. para no quedar en la cuneta a poco de acabar.

bajamos, bajamos, bajamos. subimos por 3 veces corto pero intenso. y una pista que vamos cortando nos da pie a una alegría espontánea que hace que nos giremos el uno al otro. salvo en los avituallamientos es la primera vez que cruzamos la mirada. cuando paramos y cruzamos miradas es para, con un ligero golpe de cabeza y un "vamos" indicar que salimos. aquí es para decir: dime la verdad. y contestar el otro: siempre lo he hecho.

ahí sabemos que estamos a punto de llegar a meta.

domingo, 14 de noviembre de 2021

9548

en la recta de meta es inevitable hacerlo. mientras troto torpemente ya me encuentro mirando hipnotizado correr los segundos del cronómetro del arco de llegada. sin bajar la vista busco con el tacto las dos estrellas rojas del dorsal. al notar su relieve bajo mis dedos levanto la mirada del reloj hasta el cielo y pienso fuerte que ojalá haya llegado bien arriba todo mi esfuerzo. correr con un dorsal que un amigo te ha pasado e intentar convertir la carrera en un homenaje a quien ya no está es algo que nunca había hecho. ¡que responsabilidad más bonita!


edu me pasó el número como se han de hacer las cosas. en un bar y con unas cervezas. comentando anécdotas de carreras anteriores y con la generosidad de alguien que sabe que lo disfrutaré. la conversación viró a ver si podría salir en un cajón más adelante. alguien dijo que en el mostrador de atención al corredor te lo gestionaban. pagamos las cervezas y para allá que me fui. y allí, con dos estrellas rojas lo apañaron. pensé: que maravilla, una por el regalo de edu y otra por el recuerdo de jaume.

al día siguiente, sabiendo que no estaba preparado pero si motivado por el momento, salí conservador pero ambicioso. con ganas pero con respeto. el depósito lleno pero de diésel. los diez primeros kilómetros intenté escucharme bien para ver como estaba. y lo que "escuché" me gustó. la idea era ponerme 100m delante de la liebre de 3h y no dejarla que me pasara. la subida por paseo de gracia es un primer test (si, paseo de gracia sube!) y lo pasamos con nota. ahora llegan lo que yo llamo "las grandes rectas". carrer mallorca. ida y vuelta por meridiana y el paso de la media. ida y vuelta por diagonal hasta torre agbar. para mi siempre ha sido un tramo de tirar de coco y, si es posible, ir en grupo. quedarse solo es un lastre que se puede pagar nuevo. venga, eduard, anims ! y me doy cuenta que es a mi a quien empujan...

desde que saludé a eva en carrer de sans nadie me espera hasta meridiana. pero allí están sandra, ignacio y raul. de ida y de vuelta. ¡que bien va, coño! porque el recuerdo de esos segundos se estira como un chicle y llega hasta los kilómetros por el frente litoral. porque la torre mapfre no llega nunca. o no quieres que llegue para no tener que subir por el carrer marina (si, carrer marina también sube!).

pero ahora ya está. desde arc de triomf mis escuchas internas pasan de ser cada 5kms a cada 2kms. y cuando me lanzo via laietana abajo dejo que la mirada busque el mar al fondo. porque es la forma de escapar de los edificios que en esa bajada te hacen sentir lento ya. giras. al fondo colón ajeno a los que pasamos por debajo. y muchas ganas de paralelo. me encanta subir por el paralelo. sobre todo hoy que paseo dos estrellas en mi dorsal. al dar la espalda al mar y encararlo en dirección a meta me sonrío. y noto un empujón vital, que de nuevo aparece en el carrer sepúlveda y me aisla de todo. oigo barullo fuera pero el verdadero jaleo esta dentro. en mi cabeza. grita toni y me saca del estado en el que me encuentro. justo cuando giro a izquierda y piso la alfombra azul.

la carrera no fue perfecta, pero fue entrañable y hermosa. gracias, edu. por ti, jaume.



viernes, 8 de octubre de 2021

ikigai

tengo un grupillo de gente detrás que dudo que me lo merezca. tengo un cuerpo sabio que me informa sin apenas error y al momento lo que quiere. tengo una edad con la que me permito unos errores pero no otros. tengo muchas cosas más. y otras muchas, no las tengo.

la salida en la porxada de bagá a primeros de octubre se convirtió en una meta por si sola desde el momento en que me inscribí en ultrapirineu. por diversos motivos pasaban los días, las semanas, y los entrenos que yo quería no se podían hacer. que os voy a contar, verdad! la mayoría de los que leéis esto ya me habéis sufrido en la distancia media y, sobre todo, en la corta. intentando poder orden y concierto, montaña y asfalto, reposos y tobillera...fui perpetrando una serie de entrenamientos que nunca recomendaría a nadie. entrenos que yo notaba que a mi cuerpo le caían bien, pero sin ciencia ni lógica. y con cargas y con reposos, planeados sobre la marcha, convertí la desgana en gana. convertí un quemedevuelvanlapasta en una noche durmiendo en el coche y un madrugón para salir a las 5:30 de la mañana.

corriendo por las calles de bagá entre mucha gente ya me sentía en meta: salir sin molestias, con ganas y con la idea clara de acabar yendo siempre un punto por debajo del mio. y escuchando-me. yo no lo llamaría dosificar, porque dosificar es mucho más complejo y no incluye ir tan cómodo. no podía permitirme el lujo de caer. esta vez no. y eso, salvo por desgracia, solo lo consigo cuando el esfuerzo no es tan grande que me saca de la concentración. mandar yo en la carrera, lo llamo.

la subida hasta el niu pasando por rebost fue más rápida de lo esperado y el regalo de un amanecer con niebla que abrió en la bajada posterior dibujo una sonrisa en mi cara que duró todo el día. la fortuna de poder estar allí no se puede contar con palabras. ni con imágenes. el empujón que me pegó desde allí diego creo que me llevó hasta el serrat de las esposas en volandas. bajando despacio, si. pero no me podía caer. no podía volver a pisar torcido. hoy no. y con diego camino de gosol aparece salva. y jaume. y todo el equipo de apoyo de pau que dicen que va fino. pues nada. tira para pas dels gosolans fichando donde toca.


que ya sabía yo que este trozo era un hueso. pero que yo he venido hoy a roer. que no me lo voy a tragar entero. que pillo por una punta y ñam,ñam,ñam hasta la otra. subebaja a cortals. sube,sube,baja,aprieta a prat d'águiló. sube,goza,sube a gosolans. corre todo lo que puedas a gosol. km60....oye, a tomar por culo el hueso ;-) cerveza bien ganada. y puñado de pasta con tomate. estaba tan eufórico que podría haber pasado el control de material obligatorio colando mis ojos como frontal. feliz.

cuanta gente a la salida de la base de vida. vaya día chulo. vaya vuelta al pedraforca que nos queda por delante. sales al trote y pronto estas en un tobogán continuo que parece un videojuego. pasando pantallas y con mucha vida todavía. no veo rastro de un posible game over y paso rápido por estassen para enfrentarme a la bajada a gressolet. si llevara cesta parecía que estoy buscando setas. no se si se puede bajar más despacio pero la consigna de hoy es.....exacto ! (no podemos caernos). mentalmente yo ya estaba en sant jordi pero el cuerpo reclamó la presencia de mi pensamiento y de inmediato este retornó. junto con los dos ya hicimos el camino pasando por vents del cadí y subiendo empedrats. el agua en los pies y los muros de piedra me susurraban que lo estaba haciendo bien, que en un grupo de whatssap en un móvil guardado entre el goretex de la mochila un grupo de gente estaba contenta y siguiéndome. muy atentos. y a medida que acumulo desnivel sigue el murmullo: que no quedaba casi nada pero que no me libraba de volver a sacar el frontal. solo para mis oídos.

me despido en sant jordi y ruedo tranquilo para hacer una subida corta pero intensa, la última, a coll d'escriu. aquí es la primera vez que me aprieto bien. para probar. como suelo hacer en algunos entrenos. me aprieto y el cuerpo responde. ¡que alegría que pase esto por el km90! solo por probar. que ahora ya todo es bajada, asfalto y una parte nueva que, desde el otro lado del rio bastareny, te encara directo a la llegada. una subida por las calles del pueblo. y un arco de meta. de una meta que es salida. un final que tiene sabor a principio. unos números que me dan la razón a como he entrenado y como he afrontado la carrera. a mi y a todxs los que han estado cerca.

seguimos...



lunes, 2 de agosto de 2021

envenenado

thelongestnight. pruebas un día y estas perdido. pero curiosamente notas que te pierdes mientras te encuentras contigo mismo. y sientes que esa pieza, que no acababa de encajar hace meses, vuelve encontrar su sitio en un puzzle donde se va intuyendo una foto que ya tiene sentido. y que te gusta. yo me entiendo...y creo que la mayoría de los que han estado en pratdip seguro que también.

porque en el adn de todo lo que organiza nuestro lazarus mestralero esta la esencia de lo que a mi me gusta cuando corro por la montaña. la mente de marc fernández y la ayuda de sus incondicionales cocinan a fuego lento el veneno de la vida, la receta del karpe diem: una dificultad encubierta, un compañerismo envolvente y un fin solidario. un circuito de 5,7 kms y un desnivel de 270+ para dar vueltas alternando en ambos sentidos puede no tener mucho sentido. si para hacerlo tienes 60 minutos la cosa se empieza a poner interesante. añadamos ahora salir un viernes a las 21:00h y los ojitos empiezan a brillar pensando en perseguir durante horas la luz del frontal. y el toque de calidad: las salidas son a cada hora en punto, si no llegas no sales y así hasta que solo quede uno. ¿quééééééé? envenena o no el planazo. está o no está oculta una posible dificultad que te pega directo en toda la cara ya en el primer kilómetro. porque empezamos puntuales a las nueve de la tarde con las últimas luces del día pero antes de la primera hora ya vamos con las largas para bajada delicada, sudando como pollos y agradeciendo que se haga oscuro para no ver como las nubes van cercándonos para descargar unas horas después. dificultad encubierta=venenazo. 


la zona común es un polideportivo donde cada uno monta su chiringuito. el que llegue con tiempo descansará unos minutos antes de la siguiente salida. el que llegue tarde se quedará ya descansando. ir y venir cada hora. caras y caretos. trotes y paseos. nutrirse, cambiarse de ropa, sentarse e incluso dormir 4 o 5 minutos. y cada hora más gente animando en la salida y menos corriendo. pero todos, a toque de campana, compañeros del resto. es una fiesta que nadie se quiere perder. cuando amanece y apenas quedan 10 corredores de los 60ypico iniciales cada uno de los que estamos ya duchados vamos haciendo nuestra quiniela con solo un nombre final. y se discute en los corrillos. más veneno.

y todo esto gana aun más sentido cuando podemos colaborar dando apoyo al #proyectoemma. inscripción, donaciones por kilómetro o lo que sea. que la investigación del cáncer de mama siga adelante. que cada vez se detecte antes y se trate de una manera más efectiva. que las 6 vueltas mías o las 17 que hizo oriol antolí para ganar el sábado no se pierdan como lágrimas en la lluvia de la bajada del coll del marqués a pratdip una noche en la que julio se iba y llegaba agosto.

gracias a todxs por lo vivido. me voy envenenado de vacaciones. thelongestnight en las venas.